Este mes de octubre, se cumplen diez años de la inauguración de las caracolas. Las caracolas fueron el comienzo de todo, ya que cuándo entramos en ellas, ni si quiera el edificio de ladrillo (C.E.I.P. Jacarandá) estaba construido. Entramos en ellas con cuatro años cuándo ni si quiera sabíamos escribir. Y ahora, una década después nos examinamos de sintaxis, ecuaciones, geografía e incluso sabemos escribir en inglés (algunos también en francés). Diez años que han pasado en un suspiro.
Pronto, estaremos en el nuevo edificio del instituto y sé que aunque nos hayamos sentido algo incómodos por el poco espacio y los pocos recursos con los que hemos estado estos casi tres años, añoraremos las caracolas ya que hemos vivido grande momentos allí.
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